Hace 50 años, el fin de semana del 17 al 19 de febrero de 1967, 20 estudiantes católicos norteamericanos de la Universidad de Duquesne se fueron de convivencia cerca de Pittsburgh (EEUU). Allí rezaron para pedir el bautismo en el Espíritu, una acción potente del Espíritu Santo que transformara sus vidas.
Al principio, no pareció pasar gran cosa. Hicieron un descanso, pero poco después se encontraron con que cada uno por su cuenta acudía a la capilla y allí no podían dejar de rezar. Muchos alababan a Dios en voz alta, con entusiasmo. Otros sentían un gozo que les llevaba a bailar. Otros lloraban de alegría. Algunos cayeron como fulminados ante el Sagrario de la capilla, en un sentimiento de adoración abrumador.
Cuando volvieron a su campus universitario de Duquesne, se lo contaron a sus compañeros de habitación, de alojamiento, sus amigos, parientes, hermanos, novias y novios.
De 20 estudiantes a 100 millones de personas en 50 años
Aunque la universidad era católica, nadie del clero local lo apoyó de ninguna manera, el desinterés era completo. Fueron los jóvenes y algunos profesores quienes lo contagiaron de campus en campus, de ciudad en ciudad. Cada semana necesitaban juntarse y rezar, en voz alta y con mucha música.
A través de gente activa en Cursillos de Cristiandad y en otras redes católicas se extendió por Estados Unidos y por el mundo. Les llamaban “pentecostales católicos” o “católicos carismáticos”. Así nació la Renovación Carismática Católica.
Jubileo de Oro de la RCC de Bogotá
En Bogotá, la cita para unirse a la celebración de este encuentro del Jubileo de los 50 años de la RCC, fue en la Catedral Primada de Colombia, en el centro de la capital. Allí se encontraron diferentes comunidades y grupos provenientes de las diócesis urbanas y de la arquidiócesis de Bogotá.
La alegría, fuerza y el entusiasmo que caracteriza a estas comunidades se hizo visible a través de las pancartas, camisetas de diferentes colores, música, pendones y solemnidad en la celebración de los 50 años de existencia.
Recordemos que la La Renovación Carismática Católica es una conversión y entrega constante a Dios, una docilidad creciente al Espíritu Santo. De allí que para la Iglesia, la Renovación es un Pentecostés actual para renovar la Iglesia de hoy.
Así lo ratificó el padre Diego Jaramillo quien concelebró la Sagrada Eucaristía, presidida por el señor cardenal Rubén Salazar Gómez. A continuación, palabras del padre Diego Jaramillo, presidente de la Corporación Minuto de Dios, quien a mediados de los años 80 creó el Centro Carismático Minuto de Dios (librerías, emisoras, escuelas de evangelización, casa de retiros), Lumen 2000 Colombia (televisión) y la Corporación de Salud El Minuto de Dios:
Una presencia consolidada
La Renovación Carismática Católica está extendida, sobre todo, en Estados Unidos, Sudamérica, Caribe, India y África. En Europa cuenta con una presencia importante en Francia y en Italia, y en años recientes se ha ido extendiendo por países de Europa Oriental.
Después de 50 años, la Renovación ha generado una multitud de conversiones, una multitud de vocaciones y sus comunidades y sacerdotes ya cuentan con numerosos obispos, sobre todo en América del Norte y del Sur.
La Renovación cuenta con un despacho en Roma para coordinarse con el Papa y la curia, llamado ICCRS (Servicios Internacionales de Renovación Carismática Católica, www.iccrs.org).
Fuente: Aleteia-OAC
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