martes, 15 de septiembre de 2015

Se posesionó el rector de la Casa de Formación “La Misión”


El padre Edgardo Figueroa Padilla recordó en su homilía la necesidad de “Apasionarse por Jesucristo”.

En la capilla de la Universidad Minuto de Dios y ante la presencia del Superior Provincial, padre Raúl Téllez Villamil, los miembros del equipo de formación y los seminaristas de la Casa de Formación “La Misión”, se posesionó como nuevo rector el padre Edgardo Figueroa Padilla.

El padre Edgardo afirmó –recordando la memoria de la Virgen de los Dolores - que “se debe vivir esta celebración como un momento privilegiado. Hoy evitamos el dolor, el sufrimiento y las dificultades porque no nos gustan y sin embargo la vida está colmada por esto”.

Igualmente el padre Figueroa se refirió al Evangelio y el aporte que este nos puede brindar con ocasión del sufrimiento:

“El sufrimiento no es algo que se busca, el sufrimiento es una ayuda y una manera de enfrentar la realidad que se nos presenta”. María, a través de sus dolores, “se nos ofrece como la primera discípula y considero que ella nos puede iluminar el camino en la Casa de Formación y todo lo que se puede vivir aquí. Ella está presente en la alegría y la dificultad: en el momento redentor y junto a la cruz está con el discípulo amado. Es también una invitación hoy a caminar con Jesucristo en las buenas y en las malas”.

El nuevo rector mencionó algunos aspectos importantes que ayudarán a vivir el tiempo de formación:

“Lo más importante para nosotros es Jesucristo, el Evangelio. El papa Francisco en su encíclica “Evangelii Gaudium”, afirma que “nadie nos puede robar la alegría del Evangelio”. Nuestra vocación ha sido una experiencia de alegría porque hemos encontrado a quien llena nuestra vida, a quien hemos decidido seguir y estar con él. Hemos respondido en una Casa de Formación, en la Congregación de Jesús y María, aquí, dentro de una espiritualidad: la espiritualidad eudista. Esto nos propone un camino de vida, el camino de vida de la escuela de Juan Eudes. A través del estudio de su espiritualidad, descubrimos a un santo apasionado por el Señor.

Conociendo su vida y sus escritos, san Juan Eudes es un constante apasionado por Jesucristo, por el Evangelio, por la Palabra de Dios, por el encuentro personal con Él. Se desborda en apasionamiento por Él. Él quiere compartir esta experiencia a través de su propuesta de formar a Jesús en el Corazón, continuando y completando su vida en cada cristiano. Los invito a que nuestra espiritualidad, nuestra pastoral, y todo nuestro apostolado sea de apasionamiento. A que nuestra formación académica sea de apasionamiento, también nuestro camino aquí en esta escuela, para poder revitalizar nuestra Iglesia y nuestra Congregación.

Es necesario preguntarse: ¿Cómo evangelizamos nuestra Casa de Formación? ¿De qué hablamos? ¿De qué reflexionamos? El objetivo es formar a Jesús según la propuesta del Papa Francisco de ir a las periferias del hombre, ir al corazón, a la vida y a la necesidad.

El padre Rafael García Herreros contempló esta experiencia y la ha transmitido a cada uno de sus hermanos. Que nos apasionemos por Jesús en nuestra Casa de Formación.

Tenemos que renovar nuestro apasionamiento por Jesús para hacerlo vivir y reinar en nuestro corazón”.

Finalmente, el padre Edgardo profesó su fe en el Padre y el Hijo y el Espíritu Santo y en la Iglesia. También firmó junto con los incorporados presentes el libro donde se hizo oficial la posesión como nuevo rector de la Casa de Formación Eudista “La Misión”, de la Provincia Minuto de Dios.






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