La Lectio Divina es tener un compartir con Dios, una entrada a la oración pues la única que nos lleva al Padre Dios. La Lectio Divina es la lectura de la Sagrada Escritura de u modo no académico, sino espiritual, lo que nos permitirá “conocer a Jesús de un modo cada vez más personal, escuchándolo, viviendo con él, estando con él, siendo sus amigos, en una comunión de pensamiento que “no es algo meramente intelectual, sino también una comunión de sentimientos y de voluntad, y por tanto también del obrar”. Según el Pastor Martin Hoegger la lectio divina nos ayuda a transformarnos en la vida espiritual, no solamente de manera individual sino que nos motiva a entrar en un común acuerdo con la comunidad, Ignacio de Bayona en una de sus cartas afirma que la “Paz es una atribución al hombre que nos hace circular compartiéndola con los demás” afirmo en su intervención el pastor Hoegger.
La lectio divina nos hunde en una efusión del espíritu en un fuego espiritual para así construir relaciones profundas más allá de todos los límites de todas las iglesias en el mundo.
Por otro lado el pastor hace referencia a sus experiencias ecuménicas y nos invita, a que todos los jóvenes debemos ser tocados por la misericordia de Dios. La lectura orante de la Palabra, más que una reflexión, es una experiencia de encuentro personal e íntimo con Dios, que te ama y sale a tu encuentro. Estos pasos te van llevando al mismo interior de la Palabra. Así es la misericordia de Dios a traves de la lectio divina.
Si eres fiel a la oración con y desde la Palabra de Dios, tu vida irá cambiando. La Palabra te hará confrontar tus criterios, valores, sentimientos, actitudes y conducta con lo que ella misma te vaya inspirando. Ama la Palabra, estúdiala, déjala que moldee tu personalidad.
Medita qué te dice la Palabra que has leído lentamente. Una vez que hayas captado el sentido del texto, entonces puedes hacerte esta pregunta: qué me dice esta Palabra.
Por último el pastor Hoegger hace una oración la cual escribió después de hacer lectio Divina, “Señor en el momento de ponerme a la escucha, en el momento de escuchar te manifiesto de poder encontrarme contigo y de sentir en mí ser tu misericordia” así concluyo Martin Hoegger.
En conclusión contempla quédate impresionado, fascinado, en silencio, en calma. Déjate animar por el ardor de la Palabra, como quien recibe el calor del sol. “Así es la misericordia del señor”La Lectio Divina es tener un compartir con Dios, una entrada a la oración pues la única que nos lleva al Padre Dios.
En conclusión contempla quédate impresionado, fascinado, en silencio, en calma. Déjate animar por el ardor de la Palabra, como quien recibe el calor del sol. “Así es la misericordia del señor”
Si eres fiel a la oración con y desde la Palabra de Dios, tu vida irá cambiando. La Palabra te hará confrontar tus criterios, valores, sentimientos, actitudes y conducta con lo que ella misma te vaya inspirando. Ama la Palabra, estúdiala, déjala que moldee tu personalidad.
Medita qué te dice la Palabra que has leído lentamente. Una vez que hayas captado el sentido del texto, entonces puedes hacerte esta pregunta: qué me dice esta Palabra.
Por último el pastor Hoegger hace una oración la cual escribió después de hacer lectio Divina, “Señor en el momento de ponerme a la escucha, en el momento de escuchar te manifiesto de poder encontrarme contigo y de sentir en mí ser tu misericordia” así concluyo Martin Hoegger.
En conclusión contempla quédate impresionado, fascinado, en silencio, en calma. Déjate animar por el ardor de la Palabra, como quien recibe el calor del sol. “Así es la misericordia del señor”La Lectio Divina es tener un compartir con Dios, una entrada a la oración pues la única que nos lleva al Padre Dios.
En conclusión contempla quédate impresionado, fascinado, en silencio, en calma. Déjate animar por el ardor de la Palabra, como quien recibe el calor del sol. “Así es la misericordia del señor”
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