![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiwBsXyePTaDMgLSor7EY5BZtHXvpbOGy4jd2mQbvBbB7DjjBVzVbNTs_c0HmqIGAkTZnAa09vV69etgHi-9ghHU0k6tZLZKSeUbMWDWqa6q3w50dad3rH_GJip0ZLOr3s4bHba_ilrwRnR/s400/IMG-20151116-WA0044-2.jpg)
En su homilía Mnsr. Torres resaltó que Cristo, es el Siervo de Dios por excelencia y el Pastor Bueno que guía a los suyos hacia el único redil de seguridad y libertad. Desde su nacimiento hasta su entrega sacerdotal en el madero de la Cruz, Jesús se muestra como ese siervo sufriente, pequeño, humillado y pobre, que entrega su existencia para conseguir la salvación de todos.
Por otra parte, hablándole a sus mismos discípulos para advertirles que no se debía pensar al estilo de los reyes de la tierra, les invitó a imitarlo: no a ser servido sino a servir, lo cual significa dar la vida por la salvación de la humanidad. A lo largo de su ministerio terreno, Jesús fue manifestándose como tal servidor: con sus milagros y hechos prodigiosos, con sus enseñanzas, con su cercanía a todos, en especial los más pobres y los pecadores. Y, antes de manifestarse como el “gran servidor” por medio de su entrega en la Cruz, realizó un gesto, del cual pidió a sus discípulos fueran capaces de repetirlo con todos: les lavó los pies, para así manifestarse como el auténtico servidor.
Así mismo reflexionó junto al pueblo de Dios sobre lo valioso del Diaconado ..¿qué significa configurarse a Cristo Pastor Bueno y servidor de todos? Primero que nada identificarse con Él y actuar en su nombre en lo que es específico de los diáconos: la Palabra, la Liturgia y la Caridad… Pero siempre imitando a Cristo. La ordenación diaconal configura a quien la recibe a ese Cristo Siervo de Dios y Buen Pastor, con todo lo que ello supone e implica.
El verdadero amor consiste en servir de manera decidida y total: no hay mayor amor que dar la vida por los amigos, nos enseña el mismo Jesús. Así, servidor y buen pastor se hacen realidad en una misma figura y, sobre todo, en la persona de Jesús. Cuando Él le pide a los suyos de imitarlo en el servicio, les está dando un mandamiento que confirma esa invitación: “ámense los unos a los otros como Yo los he amado” , dentro del rito de la ordenación diaconal nuestro hermano Jorge Yoel Mora prometió solemnemente a Dios y a su iglesia ser obediente y fiel al magisterio, así mismo se comprometió a vivir una vida célibe, Monseñor Alfredo Torres resaltó que esta virtud y gracia de Dios es un verdadero regalo en el cual el hombre deja su propia capacidad de ser papá, para hacer realidad la paternidad de Dios a todos los seres humanos. No puede haber celibato si no hay amor, y un amor dispuesto a dar la vida por los demás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario